//
estas leyendo...
primarias, psoe, rubalcaba

La abolición de la «fiesta»

Artículo publicado originalmente en la Web de la Cadena SER 

Aunque el título del artículo pueda sugerirlo, no voy a hablar en este caso del enojoso asunto de la supresión o no de lo que tantas personas denominan la “fiesta nacional», esto es, las corridas de toros. De que desaparecieran en cierta parte de España, ya se ocupó, curiosamente, un andaluz -presuntamente aquejado del síndrome de Estocolmo- cuyo nombre, ya casi olvidado, era y sigue siendo Montilla.

Pero como decía al principio, hoy no voy a hablar de esa abolición, sino de una en principio, y con permiso de los taurinos, mucho más importante. Hablo de la abolición de la “fiesta de la democracia” socialista.

El término, no por manido menos acertado, se ha aplicado siempre a las jornadas electorales celebradas en España, desde que afortunadamente disfrutamos de un sistema democrático y fue recientemente utilizado -en un fortísimo arrebato de originalidad pensarán ustedes- para definir el pasado proceso de primarias del Partido Socialista de Madrid. Ad nauseam se utilizó la expresión para definir algo que más que una fiesta, a todo el mundo le resultaba mucho más parecido al “Duelo a garrotazos” de Goya, pero ya se sabe que para los políticos, a veces, negar la evidencia no es capricho, sino necesidad.

Pues bien, the party is over, o sea, la fiesta queda abolida, por decreto de fecha 26 de mayo de 2011, fecha coincidente a la sazón con la triste y emotiva intervención de Carme Chacón para anunciar urbi et orbi que su candidatura, que nunca existió, dejaba de existir.

El texto completo de su intervención, merecería un análisis hermenéutico, al que renuncio de antemano, pero del que vale la pena destacar que tras la presentación de la renuncia, los seis siguientes párrafos comienzan con la palabra “quería”. Y es que se ve, que sí “quería”, pero no “podía” con el todopoderoso Rubalcaba, que ha decidido que las primarias sean lo más primarias posibles, es decir, con un único candidato con posibilidad de victoria.

Las razones para acabar con la “fiesta de la democracia” socialista son seguramente variadas, aunque es innegable que el ejemplo de lo ocurrido en Madrid con Tomás Gómez y Trini ha debido tener su peso. Con que las cosas hubieran salido la mitad de mal que en Madrid, ya habría sido un desastre.

Dijo Chacón en su intervención que “desde el primer momento ha habido quienes, desde el Partido Socialista, se movilizaron contra la celebración de unas primarias, que dar la voz a los militantes generaba división y urgían a la designación de un candidato único”. O sea que no querían dejar ni que lo intentara.

Medio en serio, medio en broma, la renuncia de Chacón ha sido comentada en las Redes Sociales como un caso claro de mobbing. Lo cierto es que según todos los especialistas en la denominada “Fase de la intervención de la empresa”, presente siempre en todo mobbing, se observa que la dirección suele ver a la víctima como el problema a combatir, sin reparar en que el origen del mismo está en otro lado.

Según también todas las fuentes, la palabra mobbing deriva del verbo inglés “to mob”, es decir atacar con fuerza. Lo que es menos conocido, es que dicho término fue introducido por el eminente etólogo Konrad Lorenz, para referirse al comportamiento agresivo de algunas especies de pájaros contra sus rivales. Ignoro por completo si el estudio se realizó sobre faisanes, pero es innegable que Carme Chacón forma ya parte de la historia de la ornitología.

Comentarios

Un comentario en “La abolición de la «fiesta»

  1. Más que “abolición de la fiesta de la democracia” por parte de los socialistas, veo una gran “liquidación de socialistas por parte de la democracia” y una contención generalizada de la alegría de los vencedores, que no se si es por no ofender a los vencidos o por la gran responsabilidad que se les viene encima.
    Si hacemos balance de la situación podremos ver el campo lleno de cadáveres, me refiero a cadáveres políticos que deambulan como zombis o, como dicen los castizos “como pollos sin cabeza”, que en su deambular no acaban de creerse los resultados y que en su fuero interno piensan que “esto les ha pasado a otros, no a ellos”.
    Como primera medida y para hacer frente a la nueva situación, los vencidos han “elegido” un líder con un look que quedaría finalista en una competición de “dar el pésame” y que si participara en el Wrestling se llamaría “Undertaker”. Pero que él prefiere, según ha dicho, que le llamen “Alfredo”.
    El escenario se presenta con morbo y bastante entretenido.

    Publicado por Paquito | 05/06/2011, 6:58 am

Deja un comentario

Mis fotos en Flickr